El viernes 2 de julio a las 17h inicia el dictado del “Trayecto formativo para la inserción laboral en la administración pública de personas trans”, impulsado por la Universidad Nacional de La Pampa, la Municipalidad de General Pico y la Dirección de Políticas de Género y Diversidad de la Municipalidad de Santa Rosa. La actividad se desarrollará en la sede de Punto Digital del Barrio Rucci y contará con la presencia de la intendenta Lic. Fernanda Alonso y la vicerrectora de la UNLPam, Prof. Verónica Moreno.

El objetivo del trayecto es ofrecer una formación específica que permita desarrollar capacidades para el desempeño de tareas administrativas en el ámbito de la Administración Pública Nacional, Provincial y/o Municipal.

El primer encuentro estará a cargo de la Lic. Laura Piñero, especialista en Orientación Laboral, quien dictará el módulo: “El trabajo en equipo y la comunicación”; e Ivanna Cabot, directora de Despacho, Mesa de Entradas y Archivo de la Secretaría Legal y Técnica de la UNLPam, que estará a cargo del “Taller de prácticas del lenguaje”.
La capacitación se extenderá durante un año y se desarrollará en la modalidad semipresencial. Los encuentros virtuales se realizarán de manera simultánea tanto en General Pico como en Santa Rosa, donde la sede será la Facultad de Ciencias Económicas y Jurídicas.

Las dificultades y obstáculos existentes para el acceso de las personas trans al ejercicio efectivo de derechos fundamentales, en particular para el acceso a la salud, la educación y el empleo, constituyen los ejes centrales de la exclusión social que caracteriza la situación mayoritaria de las personas travestis, transexuales y transgénero en nuestro país.

Un estudio realizado por la Fundación Huésped en colaboración con la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de la Argentina (ATTTA) muestra que la precariedad laboral es una de las características que afecta a este colectivo. Asimismo, se revela que 5 de cada 10 personas informan que se les ha negado un trabajo debido a su identidad trans y que solo 1 de cada 10 hombres y mujeres reportó tener aportes jubilatorios.

El trayecto de formación contribuye a reducir las brechas y segregaciones estructurales de género que existen en el mundo del trabajo, el empleo y la producción desde una mirada de derechos humanos.